Rehabilitación casa en La Bisbal

Proyecto de Rehabilitación e interiorismo para una casa de pueblo del siglo XVIII en La Bisbal d’Empordà.
AÑO 2003-2005

DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO

ARQUITECTURA E INTERIORISMO EN EL BAIX EMPORDÀ, MI PRIMERA CASA:
Mi primer gran proyecto de interiorismo en Girona fue, precisamente, mi propia casa. Supuso un cambio vital para mí y mi entonces joven familia. Dejamos atrás nuestro hogar en Sant Cugat del Vallès, en la provincia de Barcelona, para cumplir el sueño compartido por tantos barceloneses: vivir en el Baix Empordà, ese lugar al que acudíamos siempre que podíamos, ya fuera en vacaciones o fines de semana.
En 2003 dimos finalmente el paso y vendimos nuestro piso para comprar una antigua y deteriorada casa de pueblo en pleno corazón de La Bisbal d’Empordà.

DESCRIPCIÓN DEL PROYECTO:
Me encontraba ante un gran reto, y al mismo tiempo, el sueño de cualquier interiorista: la rehabilitación e interiorismo de una casa de pueblo del siglo XVIII.
La edificación, de 300 m², contaba con paredes de piedra, vigas de madera y una cubierta que necesitaba una profunda intervención. El interior presentaba una distribución tan fragmentada como desconcertante: unas escaleras conectaban la primera planta directamente con la tercera, sin pasar por la segunda; para acceder a esta última, en cambio, había que bajar desde la tercera.
Nunca llegué a descubrir el porqué de semejante planteamiento. Quizá, como sucede a menudo en este tipo de viviendas históricas, la explicación esté en antiguas divisiones heredadas entre familias, que daban lugar a estancias que se metían literalmente en la casa del vecino y viceversa.
Con la ayuda de mi arquitecto de confianza, nos pusimos manos a la obra para devolverle la lógica, la belleza y la vida a este espacio único.

PROCESO DE REFORMA:
Lo primero fue devolver a la casa su lógica espacial. Redibujamos la distribución para conectar de manera fluida las tres plantas, creando un recorrido natural y funcional. Queríamos respetar el alma de la vivienda, pero adaptarla a las necesidades de nuestra familia.
A este reto se sumaba otro: parte de la casa estaba catalogada como vivienda de primera categoría, al encontrarse en pleno casco antiguo de La Bisbal d’Empordà. La fachada principal daba directamente a la plaza mayor y se asentaba parcialmente sobre una de las históricas vueltas, lo que exigía una especial sensibilidad y cuidado en cada decisión. La intervención debía ser respetuosa con el entorno y con la normativa patrimonial.
La estructura original nos regalaba elementos de gran valor: muros de piedra, forjados de madera y espacios con mucha personalidad. Decidimos restaurarlos y ponerlos en valor, combinándolos con intervenciones actuales.
Derribamos tabiques innecesarios y apostamos por estancias más amplias y conectadas, que facilitaran nuestra vida familiar.
No se podían modificar las aberturas originales, por lo que trabajamos la luz y la ventilación desde el interior, potenciando la amplitud con una nueva distribución y materiales luminosos.
La reforma se realizó con equipos locales, expertos en la rehabilitación de este tipo de casas, cuyo conocimiento permitió conservar su esencia y darle una nueva vida.

A nivel personal y profesional, este proyecto marcó el inicio de mi trayectoria en la rehabilitación de viviendas históricas. Fue mi primer gran aprendizaje en interiorismo en el Empordà, y desde entonces he seguido trabajando con la misma filosofía: unir tradición y contemporaneidad para crear hogares únicos y llenos de carácter.

ARQUITECTO: Rafael Bracons Masdeu
INTERIORISTA: Cristina Peralta Nebot